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17 Nov

Monasterio de La Victoria

Hoy queremos hablaros del Monasterio de la Victoria, otro de los imperdibles en tu visita a nuestra ciudad.

El monasterio de la Victoria se funda en una zona situada a extramuros de la ciudad medieval, hacia el noroeste, en el camino entre Cádiz y Jerez de la Frontera. Los duques de Medinaceli, junto a un pequeño caño, conocido como del Molino, establecen el lugar para el monasterio, como reza en una lápida fundacional situada a los pies de la iglesia, rodeado de las tierras de labor que en su origen serían atendidas por los propios monjes.

Las obras iniciadas por los monjes mínimos de San Francisco de Paula, responden al prototipo de fundación abacial de los monjes blancos de San Bernardo. Lo conservado de la obra original del monasterio, la iglesia, su torre campanario, el claustro, la sacristía con el oratorio y las salas capitulares, se ajustan de forma precisa al modelo de las obras del Cister. En 1935 se realizaron intervenciones en las que desaparecieron el refectorio, los artesonados mudéjares del lado sur y la portada ojival lateral.

Las obras del monasterio de la Victoria se iniciaron el 7 de junio de 1504, entregándose a la orden de los Mínimos el 12 de octubre de 1517. En esta primera fase se levantaron la iglesia con sus portadas, la torre con su escalera original, exceptuando el cuerpo de campanas, y el sector sur de la parte baja del claustro y, a partir de 1517 y hasta 1545, el resto de la planta baja del claustro y el refectorio primitivo. Al finalizar el siglo XVI, ya en estilo renacentista, se construyeron los dormitorios del lado este y el segundo cuerpo del claustro y también el segundo cuerpo de la torre, la portería y las dependencias domésticas.

En el siglo XVIII se labró la sala capitular, diseñada en 1699 en estilo gótico. Entre finales del XVIII y principios del XIX debió completarse el ala sur, que hasta entonces solo estaría ocupada por la portería.

Entre los artífices que participaron en su construcción destacan Alonso o Alfonso Rodríguez, que trabaja en la catedral de Sevilla entre 1502 y 1513, en las iglesias de Santa María de Carmona y en la de Santiago de Alcalá de Guadaíra, y el ingeniero militar Cristóbal de Rojas, durante su estancia en la bahía gaditana poco después de 1600.

En la actualidad, el monasterio alberga exposiciones y eventos, como la pasada exposición de Zurbarán en el mes de octubre, y puede ser visitado por turistas y locales. Una visita que no debes perderte durante tu estancia en El Puerto.